Clovia tenía 11 años cuando el terremoto de Haití en 2010 terminó con la vida de su padre. Clovia nos cuenta cómo leer la Biblia le ha ayudado a ser positiva en medio de las circunstancias devastadoras que ha vivido.
«Nunca fuimos una famila adinerada, ni siquiera antes del terremoto. Nuestra casa no era grande ni confortable; pero mi padre, mi madre, mi hermano pequeño y yo vivíamos juntos como una familia y estábamos contentos. Mi padre falleció en el terremoto y durante días no encontré ni a mi madre ni a mi hermano. Me refugié en una tienda de campaña levantada cerca del lugar en el que antes habíamos vivido. Me sentía profundamente perdida y triste hasta que días después mi madre y mi hermano aparecieron. ¡Estaba tan feliz!
Vivimos en una tienda de campaña durante más de un año lo cual fue una experiencia realmente dura, hasta que mi madre encontró una casa pequeña a la que nos mudamos con la esperanza de reanudar nuestras vidas. Volví de nuevo a la escuela, pero me sentía muy deprimida. Entonces empecé a ir a la iglesia y a involucrarme en algunas de las actividades, lo cual me ayudó bastante. Desde el primer día que asistí a la iglesia deseaba comprar una BIblia, pero no tenía suficiente dinero. Asistí al campamento de verano el último día me regalaron una Biblia en criollo.¡Qué alegría!
La llevé a casa conmigo, sintiendo que había encontrado un nuevo amigo. La primera vez que me senté y la leí por mí misma, la abrí por el Libro de Ester. Lo leí y entendí que era un mensaje para mí. El relato acerca de la valentía de la Reina Ester sigue siendo uno de mis favoritos, y siempre que lo leo me siento bendecida. e hecho, cada vez que leo la Biblia me siento confortada e inspirada: es como un padre, un consejero y un amigo para mí, enseñándome sabiduría, guiándome y ayudándome a luchar con las emociones negativas. La leo a menudo, y aunque no siempre me resulta fácil entenderla, persevero en su lectura.
¡Estoy tan agradecida por mi Biblia. No puedo imaginar mi vida sin ella!»
Damos gracias al Señor por todos aquellos que colaboraron con la Sociedad Bíblica de España, especialmente a la P.E.S.E. (Diaconía), por apoyar con los donativos recogidos la distribución gratuita de Biblias de la Sociedad Bíblica de Haití.