Ya son mas de 9 meses de guerra y la invasión de Rusia en Ucrania continúa.
Desde el momento en que las tropas rusas cruzaran la frontera en varios puntos, y estallasen los bombardeos el 24 de febrero, Sociedad Bíblica se ha movilizado para ayudar al pueblo ucraniano de diferentes formas.
Los miembros de nuestro equipo en Kiev han brindado asistencia humanitaria en varias ciudades, a menudo, bajo la amenaza de bombardeos; hemos trabajado unidos al equipo de la iglesia local de Kharvik, apoyando a los barrios más dañados, llevando comida, Biblias y otro tipo de ayudas; y desde Sociedad Bíblica en España hemos podido entregar 3.000 Biblias para niños y 4.000 nuevos testamentos a ucranianos en regiones devastadas por la guerra.
Recientemente, aquí en Madrid, hemos donado material bíblico infantil ucraniano a la iglesia Buen Pastor, en Móstoles, a una profesora ucraniana que da clases de español y religión en un centro de refugiados, y a los niños. En medio de tanto peligro y dolor, bajo amenaza y estallidos de bombas, el hambre por la palabra de Dios en el pueblo ucraniano, tanto dentro como fuera de sus fronteras, sigue creciendo.
Estamos agradecidos a Dios, y a todos los donantes, de poder seguir sirviendo al pueblo ucraniano de diferentes formas.
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